Y es que con la de vueltas que da la vida, nunca se sabe lo que te deparará el mañana. Y aquí estoy, con la incertidumbre de si podré volver este domingo al barrio de Englefield Green, Egham, o si me quedaré en mi casa, en Almería por tiempo indefinido x.x
La naturaleza es lo que tiene, que es incontrolable e impredecible, y nosotros, meros humanos, no podemos más que intentar seguir con nuestras superficiales vidas en la medida de lo posible, y cuando no lo es, pues toca joderse.
La semana que viene tengo un examen y varios trabajos que entregar en Royal Holloway, y si no puedo estar allí tengo que hacer mil chanchullos para excusar mi ausencia y que no me pongan un cero como una catedral. En fin, dichosa burocracia...
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